“Me parece un horror y un verdadero desatino que, en pleno siglo XXI, con una República consolidada, al menos en aspectos formales, los adalides de la libertad NO permitan que la prensa libre los interpele con preguntas. Tal prohibición los convierte, sin lugar a dudas, en verdaderos apostatas de la libertad que pregonan ‘Urbi et orbi’. Se comienzan a perfilar, de a poco nomás y antes de lo que sería razonable, en parte de la misma casta que critican, muchas veces apelando a gritos desaforados por parte de su Máximo referente».
«Su nombre partidario deja de individualizarse con la sigla LLA y muta estrepitosamente a la de LLR. Porque de esa manera, poniéndole un límite prohibitivo a los comunicadores de una República, esa libertad que recitan hasta el empalagamiento, comienza a retroceder. Y lo peor de todo, que lo hace peligrosamente en cuatro patas».
«A Paraná llegó ayer el líder nacional de La Libertad Avanza. Y regresó a CABA el candidato a Presidente de La Libertad Retrocede. Paradojas de una sociedad líquida y de una Argentina que tiene de todo y para todos”.
Hugo Díaz
No voy a polemizar con su forma de pesar, Sr Pagliotto. Simplemente voy a manifestar mi desacuerdo con alguno de sus párrafos. En primer térnino no dice Ud cuales son las mentiras del Javier. Sepa por adelantado que jamás lo votaría… En segundo lugar lo de heces me parece un comentario grosero y ordinario. Si la aparición le paree imperdonable la aparición de este hombre, no olvide Ud que publica sus comentarios en un diario digital de neto corte peronista. Al que le quepa el sayo, que se lo ponga. No he visto que la prensa libre no haya podido interpelarlo. Pienso que está enojado, pero ni con rabia se puede mentir.