El 8 de febrero pasado, a modo de venganza por la caída de la Ley Ómnibus en el Congreso, el Ministerio de Economía de la Nación anunció la eliminación del Fondo Compensador al transporte público. La medida repercutió fuertemente al interior del país.
Ante ese panorama, la semana pasada, 16 intendentes de ciudades del interior del país (entre ellos Rosario Romero de Paraná) se agruparon para enfrentar al presidente Javier Milei por su decisión de cortar el Fondo Compensador del Interior, subsidio con el que se compensaba parte del valor del pasaje de colectivo en sus territorios. Con los jefes comunales de Córdoba y Rosario a la cabeza del reclamo, exigieron que se gire parte del impuesto a los combustibles para evitar subir la tarifa que, según calcularon, se ubicaría entre los $ 1200 y los $ 2200.
La semana pasada, Frigerio reunió a la mesa de transporte que integran los municipios de Paraná, Concordia, Gualeguaychú, Concepción del Uruguay, Chajarí y La Paz. En ese marco, comunicó que el porcentaje del subsidio que aporta la Provincia está garantizado, pero dejó en claro que no afrontará el monto que deja de llegar de Nación mediante el fondo compensador.
Ante este panorama, desde la Cámara de Transporte Urbano de Pasajeros se trasladaron hasta el Concejo para manifestarles que el precio fijado en $ 365 que tendría que comenzar a regir desde esta semana no les sirve. Y aunque no mencionaron importe alguno, siempre se tiene como referencia a la capital entrerriana donde el boleto ahora cuesta $ 680 y pasados los 8 km. de recorrido sube a $ 820.
No obstante, hay que mencionar que la salida a la situación de crisis en el transporte no puede ser solo el ajuste tarifario porque de esa forma -sin recomposición salarial alguna- comenzará a descender la cantidad de pasajeros que se transporta poniendo en riesgo las fuentes de trabajo del sector. No puede esperarse que la gente pueda soportar tarifas de $ 700, $ 1.000 o $ 1.200 sin que eso no repercuta fuertemente en sus economías familiares al punto de tener que evaluar otros medios de transporte.
En ese sentido, la solución debe ser política. Pero cabe acotar que no hay declaraciones del intendente Francisco Azcué manifestando su adhesión al reclamo de sus pares, o al menos, señalando su preocupación al respecto. Solo del diputado de JxC, Marcelo López, quien sostuvo que la eliminación del Fondo Compensador, además de «inconsulta, es discriminatoria y perjudicial para los sectores medios y medio bajos que utilizan estos servicios». No obstante, López se manifestaba mas preocupado por el sostenimiento de los subsidios al área metropolitana de Buenos Aires, donde gobierna Axel Kicillof, que por su continuidad en el interior. Ahora Milei evalúa recortar también los subsidios en territorio bonaerense.
Un consuelo para quienes veían una situación de inequidad política que en realidad termina siendo un juego de suma cero donde absolutamente todos pierden. Pero, en especial, quienes utilizan el servicio: los sectores medios y bajos, los convidados de piedra desde el 10 de diciembre en adelante.
Beatriz Romero
Todo clarito. Dicen que no hay que dar el pescado sino enseñarle a pescar. Genial. Y en el mientras tanto?… lamemos el anzuelo. … bien cabe la gradualidad.
memorioso
Y algo pasa, o en concordia esta muy barato el boleto de colectivo o en Parana esta muy caro.