«Está vigente aún el DNU (Decreto de Necesidad y Urgencia) así que ante cualquier cambio o variación que pueda existir, la Bancaria ha tomado la decisión de recolectar firmas para acompañar el proyecto de ley por los diputados nacionales Sergio Palazzo, que es nuestro secretario general, y Carlos Cisneros de Tucumán», dijo De León.
También solicitaron a las entidades intermedias ligadas a la producción agropecuaria como la Sociedad Rural, la Federación Agraria o la Fecier (Federación del Citrus de Entre Ríos) notas de adhesión al objetivo de no privatizar el banco. De León sostuvo que todos los productores se verían perjudicados si se llega a esa instancia. «Dejaría de ser la banca de fomento y de darles el respaldo financiero que históricamente les ha dado a las pequeñas y medianas empresas», explicó.
No obstante, hasta el momento no se los ha escuchado como sí cuando se había tomado la decisión de trasladar la gerencia zonal del Banco en Concordia, en el gobierno de Alberto Fernández. La Mesa de Enlace salió a reclamar a través de un comunicado. «Hoy no los estamos viendo, pero contamos que vamos a tener a corto plazo alguna respuesta de estos sectores que van a acompañar la defensa del Banco», dijo.
De la misma forma, adelantó que desaparecerían para siempre los préstamos personales o hipotecarios que se han otorgado desde siempre. «No tendrían estas carteras», remarcó. Incluso, dejarían de tener presencia «en cada rincón de la patria» como actualmente.
La Asociación Bancaria (AB), el gremio que representa a los empleados bancarios, se manifestó el martes en la sede central del Banco Nación para expresar su rechazo a una posible privatización de esta entidad, una de las medidas que impulsa la gestión de Javier Milei. En el hall central del edificio tuvo lugar una asamblea, que según la propia entidad sindical contó con 3000 personas, y de la que también participaron en señal de adhesión el triunvirato de mando de la CGT y Hugo Yasky, referente de una de las dos vertientes de la CTA.
“Rechazamos el intento de privatización del Banco Nación, que primero intentaron a través de la ley ómnibus (Ley Bases) y ahora lo intentan a través del DNU (70/23), contratando al estudio de Horacio Liendo (exministro durante la última dictadura militar) para privatizar un banco que no tiene necesidad, ni urgencia y es eficiente. Si están apurados es porque tienen ganas de hacer un negocio”, apuntó Palazzo a la agencia Télam.
Según La Política Online, el presidente Javier Milei contrató al padre de la convertibilidad, Horacio Liendo, para la reestructuración del Banco Nación y Luis Caputo busca que el fondo neoyorquino BlackRock compre una parte de las acciones. El Banco Nación figuraba entre las empresas factibles de privatización que se incluyeron en la fracasada ley ómnibus. Como el Gobierno tiene verdaderas intenciones de privatizar el banco, ya había empezado a trabajar en alternativas, según publicó ayer el portal mencionado.
En Concordia hay un libro de firmas en la CGT de calle Pellegrini, en la seccional de la Asociación Bancaria, en calle La Rioja 829 (de 8 a 20 horas), y en la sucursal del Banco Nación. «Invitamos a todos los ciudadanos que quieran acompañar a la defensa del Banco Nación. Que nos acompañen con su forma que tiene importancia en esta instancia», dijo el gremialista.
Por último, De León recordó que cuando se privatiza la banca pública, tienen experiencia al respecto como lo que sucedió con el Banco Entre Ríos. La peor parte se la lleva el personal, ya que se reducen las dotaciones. «De tener 13 o 14, las sucursales quedan con tres o cuatro empleados», dijo. En consecuencia, se restringen los servicios (se reducen las líneas de préstamos) a los clientes y se demora la atención. Incluso, en localidades con pocos habitantes se cierran sucursales o dejan a un solo empleado con un escritorio atendiendo los cajeros automáticos.