Claramente «este no es el camino para lo que es un legítimo reclamo de los gobernadores. Es imperioso que el Presidente cumpla y respete la Constitución y garantice el envío de los recursos coparticipables que corresponden a las provincias y en particular a Entre Ríos. Al no hacerlo, afecta la autonomía de nuestra provincia y la de cada uno de los entrerrianos a quienes nos debemos en nuestras responsabilidades politicas e institucionales».
«Señor Presidente, desde el Foro de Intendentes de Juntos por Entre Ríos, expresamos que en defensa de la autonomía, el federalismo y exigiendo el respeto institucional que se merecen las provincias y particularmente Entre Ríos, nos va a encontrar al lado del gobernador Rogelio Frigerio, defendiendo los intereses de los entrerrianos».
La disputa entre el presidente Javier Milei y los gobernadores provinciales de todos los signos políticos tuvo un nuevo y escandaloso capítulo ayer, con visos de ruptura. En un comunicado en el que se presentan como representantes de «Las provincias unidas del sur», los gobernadores de la Patagonia se plantaron: «Si no envían recursos, Chubut no entregará su petróleo y su gas».
Reclamaban así los fondos de la coparticipación, el transporte y la educación, y denunciaban que están «padeciendo las represalias que se anunciaron luego de que cayera la ley Omnibus». Entre otros apoyos se sumó el de la CGT, y los gobernadores de Juntos por el Cambio y el jefe de Gobierno de CABA, Jorge Macri, publicaron un documento en apoyo al planteo de Chubut, lo cual configura un escenario de enfrentamiento absoluto entre el gobierno nacional y los ejecutivos provinciales.
Lejos de buscar una solución política al conflicto expuesto, el Presidente recurrió primero a su habitual territorio de las redes, para insultar con una frenética catarata de retuits: «Buena suerte con esa amenaza pedorra»; «¿Este sorete es un golpista?», le dedicó al gobernador de Chubut, Ignacio Torres. Luego, formalizó la provocación a través de la «Oficina del Presidente de la República»: «Se le comunica al gobernador Torres que no existe la necesidad de que ponga ningún planzo de tiempo para llevar a cabo su plan de extorsión. Proceda con su amenza de inmediato y hágase cargo de las consecuencias en la Justicia».
«La Oficina del Presidente lamenta que el gobernador Torres se niegue a entender que no hay plata y, en consecuencia, se lance a emitir una amenaza de carácter chavista respaldada por Axel Kicillof y el resto de los gobernadores, que expresaron su acuerdo con el avance sobre la propiedad privada y la expropiación de empresas que necesariamente implica dicha amenaza», atacó también el Ejecutivo nacional, según Página 12.