El problema no es el ‘Plan Milei’ el problema es que el pueblo no tiene un ‘plan b’

NOS HEMOS QUEDADO SIN REFERENTES.

No hay otra forma de entender los votos de chuki si no es como una respuesta desesperada del pueblo a la dirigencia corrupta y falaz que ha venido usurpando el poder en su beneficio, falsificando pertenencias políticas y administrando el poder como una empresa privada de su propiedad, tomando los tesoros del estado como bienes de su inventario personal y exhibiéndolos con una impunidad exasperante, como es el caso de Bordet, su mujer, Bahl, su mujer, sus alfiles como los Giano, los…. Ud. los conoce.

Y a nivel nacional algo parecido, ¿a quién podrían creerle? El último en quién confiar fue Néstor, que con su claridad ideológica y sus cojones de acero para enfrentar a los conocidos de siempre logró reparar en parte, y en muy pocos años, el saqueo que había ejecutado otro infame impostor, el ‘play boy riojano’.

El mismo Néstor que se permitía laderos mediocres, intrascendentes, como Alberto ‘el Bueno’ o el manco de la lancha, a quienes conocía y los llevaba de la correa como a pichichos mimosos, a donde él quería. Pero Néstor se fue, y quedó Cristina, portadora de una equivalente claridad ideológica, pero incapaz, por un lado, de manejar ‘los pichichos’, y por otro, de generar una fuerza política a su alrededor que garantizase la continuidad. Sola si nadie que la continuara, como dicen los magos: nada por aquí, nada por allá.

Mientras tanto el sr. de los anillos, masticando un odio y desprecio profundo, por el pueblo y sus romances históricos, odio fermentado en el hecho que tuvo que asumir que el no volvería por los votos, porque el pueblo había aprendido a conocerlo, pero para el lo mismo: volvió remixado, corregido y aumentado y con una experticia macriavélica, en el manejo de los medios y a través de ellos, la manipulación de la conciencia social. Como entender, si no, que hoy sus víctimas nos explican que ‘hay que darle tiempo’ y/o que ‘los ‘kirneristas’ (SIC) no lo dejan gobernar’. Mientras el les saca la comida, los remedios los salario y cualquier beneficio que les permitiese amortiguar la desesperante situación que han instalado en solo 60 días.

Y TAMPOCO TENEMOS PROGRAMA

Y así como nos quedamos sin referentes capaces de encabezar alguna respuesta a la monstruosidad que estamos viviendo tampoco tenemos un programa alternativo al que están ejecutando.

Devolver los derechos que están avasallando no es un programa, es solo una reivindicación.

Un programa es quitarles definitivamente los resortes del poder, a saber, el manejo de las finanzas, del comercio exterior, de los puertos y las vías navegables, de la salud pública, de los medicamentos, de la educación, expulsarlos de ahí de una vez y para siempre. Pero nadie habla de eso, a lo sumo apelan a la ‘moral de los empresarios’ y pelotudeces por el estilo. Reclamos que hemos vivido por triplicado en el último medio siglo y que sabemos a donde conducen. Sino miren el ejemplo del ’Alberto el bueno’. Uno de los pichichos de Néstor al que nunca nadie debió soltarlo de la correa, pero ocurrió. Y ya es tarde para lágrimas.

¿Qué ocurrirá? Nadie lo sabe, pero por lo pronto ellos tienen la espadilla, el bastillo y los dos sietes, mientras nosotros tenemos que asumir que al PJ, el partido que se sigue atribuyendo la representación de un pueblo que no los reconoce, vuelvan en pocas semanas los Bordet, los Bahl, los Lauritos, los… ustedes los conoce. O sea que la historia se presenta con pocas esperanzas y mucha desesperación acumulada. Un coctel perfecto para el desencanto y la frustración.

El tiempo continúa su inexorable avance y siempre ocurren las cosas que no pensamos ocurrirían, habrá que ver…