En los primeros siete meses del año, los recursos totales enviados por la Nación a las provincias (coparticipación, leyes especiales y transferencias no automáticas) son unos $5,2 billones menos que el año pasado, según datos de Politikon Chaco. En el caso de la coparticipación, la baja real acumulada es del 13,1% en los primeros siete meses del año. Los giros por fuera se derrumbaron un 90% promedio.
Por ejemplo, desde la asunción de Javier Milei no se transfirió ni un peso a las cajas de jubilación no transferidas, punto que integró la hoja de reclamos de los gobernadores. Son 13 en total. La explicación que dio Francos en marzo, cuando se publicó el decreto que anuló esas transferencias, fue que había auditorías en marcha. Entonces prometió que se eliminaría ese decreto. Ni se anuló ni se reinició el pago. Hace cuatro meses se barajó la posibilidad de emitir un bono para cancelar la deuda acumulada y retomar los giros, pero no se avanzó con nada. Entre Ríos ya fue a la Corte Suprema de Justicia, donde también Córdoba tiene presentada una demanda.
Una situación similar se da con la deuda acumulada con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires por el recorte de la coparticipación. El acuerdo al que llegaron Jorge Macri y Luis Caputo para que los giros equivalgan al 2,95% y no al 1,4% se empezaría a cumplir los próximos días, pero para el retroactivo seguramente la solución será un bono.
El mes pasado las transferencias no automáticas de la Casa Rosada a las provincias registraron un diferencial: las devengadas fueron las más bajas en siete meses y las pagadas aunque siguen cayendo por arriba del 80%, fueron las más altas. Es decir, la Nación buscó reducir la deuda que, con todo, acumula $68.582 millones.
Sobre el freno a la obra pública, otro punto de la agenda de los gobernadores, si bien se avanzó con el traspaso de proyectos, ese proceso no está acompañado de recursos. Desde que asumió la actual gestión, acumula alrededor de $1 billón de fondos derivados del impuesto a los combustibles y del impuesto PAIS que no los está ejecutando y que no puede destinar a otros fines.
El otro aspecto por resolver es quién se hará cargo de la deuda acumulada. Economía dijo a este diario que “se conversará en cada caso”. Para reiniciar los trabajos se requieren cambios contractuales que, en algunos casos, deben ser autorizados por las legislaturas. En los casos en que los fondos eran nacionales pero los contratos fueron firmados por las provincias, el responsable directo de la deuda termina siendo el gobernador. Esos puntos no están dilucidados.
“La solución Caputo para estos casos suele ser la ‘salida Cammesa’”, ironiza un mandatario de la región centro, en referencia a que el ministro le pagó la deuda a la compañía administradora del mercado eléctrico mayorista con un bono en dólares a 2038, con una quita implícita del 50 por ciento. La salida, no descarta el gobernador, podría ser la que analiza para lo que la Nación debe a las cajas de jubilaciones, a la Ciudad de Buenos Aires por la coparticipación y a las ejecutoras de obras.
Fuente: La Nación
Pero ustedes apoyaron al voto de Milei
Quieren quedar bien frente a una sociedad más y más pobre dónde los servicios escenciales están todos por las nubes y de yapa, le piden al presidente y los larga con una mano atrás y otra mano adelante. No sé hagan los otarios!!!