El turno es de 7 de la tarde a las 12 de la noche. Gauna sostuvo que la tarea que realizan es enfardar los residuos que van reciclando. El trabajador sostuvo que nadie se preocupa por los elementos de trabajo que ellos utilizan. Además, remarcó que se acumula la basura que hay en los portones de la planta.
«No existimos nosotros. El tema es que hacen y deshacen a su antojo sin consultarnos a nosotros», remarcó Gauna. «Quieren deshacer el turno de nosotros, quieren dejarnos sin trabajo para meter gente de los otros turnos», añadió Gauna. «La gente que tenga un problemita o algo ya los sacan. Nos sacan la gente y la mandan para otro turno», indicó Gauna.
En efecto, un ex trabajador de la planta llamado Fernando, de 28 años, quien había trabajado un año y medio explicó que hace un mes y medio su esposa había quedado a cargo de una de sus hijos que debió ser internada en el Hospital Masvernat por un problema de salud. Roberto quedó a cargo de su otra hija, una niña de tres años, ya que no tenía quien la cuidase. Cuando quiso volver a trabajar a la planta en el horario de 1 a 6 de la tarde, llamó al encargado para avisarle y le dijo que no podía. «Me dejo afuera y me dejó afuera», dijo. Cuando le pidió que le pase por escrito la razón de su despido, la respuesta fue que no le iba a dar «ni mierda» y que había hecho abandono del trabajo. «Intenté e intenté pero me dijo que lo mío ya no tenia solución», dijo el ex reciclador.
En la planta cobraba $ 10.000 por día. Pero Fernando ahora solo cobra el plan nacional «Potenciar Trabajo» de $ 78.000 mensuales. «Yo te pregunto ¿Qué haces con $ 78.000 por mes?», dijo. «Ahora ando cirujeando y viendo como sobrevivo». Fernando dijo que había mucho maltrato verbal en la planta. Y sostuvo que no estaba trabajando para un capataz común y corriente sino para la municipalidad. «Creo que si uno está trabajando para el municipio lo tienen que tratar como persona, al menos, mínimamente», reflexionó.
El problema de quedarse sin trabajo en la planta equivale a estar en una situación peor a la que estaban cuando ingresaron. Eran recicladores que trabajaban en el Campo del Abasto cuando estaba abierto. Pero los camiones ya no descargan en el vertedero sino que lo hacen en los galpones de la planta. «Y en la calle no se puede andar sin el carnet», acotó Gauna.
Trabajador dela planta
De nuestro trabajo mucho hablan pero hay ue hacerlos están dejando afuera a personas que solo viven de ese trabajo que no tienen estudioso alguien que los apolle … el maltrato verbal es denigrante … se están producción hasta robos y nadie sabe nada todo se laban las manos y si decis algo te quieren echar
vecina
Ese lugar no funciona porque quien está a cargo…….. un hermano VEDOYA. No pudieron con la actividad privada cerrando la carnicería porque los empleados todos en negro, juicios laborales y deudas………y ahora intentaron probar en el sector publico. Muchachos….les queda grande el puesto.
Hagasé cargo señor Intendente. No lo votamos para que estos impresentables Vedoya, Enguelberg……..nos gobiernen.