Argentina confirmó la presencia de la enfermedad en equinos en las provincias de Corrientes y Santa Fe, y se han reportado casos sospechosos en establecimientos de los departamentos de Río Negro, Salto y Paysandú de la vecina República Oriental del Uruguay. La Asociación Uruguaya de Veterinaria Equina emitió recomendaciones para controlar la población de mosquitos y usar repelentes tanto en humanos como en equinos.
Medidas de Control y Prevención
Las autoridades de Entre Ríos han declarado la interdicción oficial con restricción absoluta de movimientos en los establecimientos que han notificado signos nerviosos y/o mortandad de equinos. Se ha solicitado a la población extremar las medidas de bioseguridad y notificar cualquier cambio inusual en el comportamiento de los equinos.
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) está coordinando con las cámaras de Productos Veterinarios para garantizar la disponibilidad y distribución de vacunas contra la encefalomielitis equina en el menor tiempo posible. Además, se insta a la comunidad a realizar un control efectivo de mosquitos y aplicar productos autorizados por el Senasa en el ambiente y en los animales.
Ante cambios de conducta o comportamientos poco habituales en equinos, se solicita a la población notificar al Senasa a través de diversas vías de comunicación, como concurrir a la oficina más cercana, enviar un mensaje de Whatsapp, utilizar la aplicación «Notificaciones Senasa», escribir un correo electrónico o utilizar el apartado «Avisá al Senasa» en la página web del organismo.
La situación se mantiene en constante monitoreo, y las autoridades provinciales están preparadas para implementar medidas de prevención y contención adicionales según sea necesario.
Qué es la Encefalomielitis Equina y qué peligros tiene para los seres humanos
La Encefalomielitis Equina es una enfermedad viral que afecta a los caballos y otros équidos, como burros y mulas. Es causada por varios tipos de virus, siendo los más comunes los de la familia de los alphavirus. Estos virus se transmiten principalmente a través de la picadura de mosquitos infectados.
La enfermedad afecta al sistema nervioso central de los equinos, provocando síntomas como fiebre, incoordinación, debilidad, desorientación, dificultad para tragar y, en casos más graves, convulsiones y parálisis. En algunos casos, la Encefalomielitis Equina puede ser mortal.
La enfermedad puede tener impactos significativos en la industria equina, ya que puede afectar la salud y el rendimiento de los caballos, así como causar pérdidas económicas a los propietarios y criadores. Además, la Encefalomielitis Equina es considerada una zoonosis, lo que significa que puede transmitirse de los animales a los humanos, aunque esto es menos común.
Las medidas de prevención suelen incluir la vacunación de los equinos (Algo que en Argentina se dejó de aplicar en 2016 ante la falta de casos positivos), el control de mosquitos para reducir la transmisión del virus y la identificación y aislamiento de animales infectados para evitar la propagación de la enfermedad.
La Encefalomielitis Equina es una enfermedad que puede representar riesgos para los seres humanos, aunque las infecciones humanas son relativamente raras. El virus que causa esta enfermedad puede transmitirse a los humanos a través de la picadura de mosquitos infectados. Algunos de los riesgos asociados con la Encefalomielitis Equina en humanos incluyen:
Enfermedad Neurológica: En casos raros, la infección en humanos puede causar enfermedades neurológicas similares a las observadas en caballos, como encefalitis (inflamación del cerebro) y mielitis (inflamación de la médula espinal).
Fiebre: Los síntomas pueden incluir fiebre, dolores de cabeza y malestar general.
Gravedad Variable: La gravedad de la enfermedad en humanos puede variar, desde casos asintomáticos o leves hasta formas más severas que pueden tener consecuencias a largo plazo.
Es importante destacar que la mayoría de las personas expuestas al virus de la Encefalomielitis Equina no desarrollan síntomas o solo experimentan síntomas leves. Sin embargo, en casos graves, la enfermedad puede ser potencialmente letal.
La prevención se centra en evitar las picaduras de mosquitos, ya que son los principales transmisores del virus. Además, en áreas donde la enfermedad es endémica en caballos, se pueden implementar medidas de control en la población equina para reducir la propagación del virus y, por ende, el riesgo para los humanos.
Fuentes: El Telégrafo (Uruguay), Senasa, Min. de Salud.
