Bajo la niebla de un país a la deriva, finalmente la verdadera «casta» va en camino de aprobar en Diputados y cerrar el círculo maléfico de una entrega diseñada por el Poder Real, y consumada por legisladores traidores a la Patria, que han faltado a su juramento como tal, y traicionado la ideología de los partidos para los cuales han sido elegidos.
Tenemos, por un lado, el trámite «oscuro» con que las grandes corporaciones terminan de montar un auténtico sistema de privilegios. Porque el pueblo argentino ha sido estafado por la dialéctica de los corruptos legisladores y funcionarios para conseguir una Ley, supuestamente fundacional de una nueva época en la política argentina, pero que realmente es un inmenso y gigantesco sistema de privilegios fiscales, normativos y administrativos en beneficio de grandes empresas multinacionales, dejando en claro escenario negativo a las empresas nacionales que sí tienen que tributar en el país. Es que la extrema derecha gobernante, en alianza con otras fuerzas de la misma derecha y con la «oportuna» colaboración espuria de opositores dialoguistas, terminó adhiriendo a la propuesta para consagrar un verdadero sistema de «casta» que el mismo presidente fetiche dice combatir.
Para defender la consagración de esta legalización de la infamia legislativa, la también infame Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, instaló una guardia pretoriana cuyos integrantes han asumido un compromiso con la crueldad sin límites, haciendo uso y abuso de la violencia represora sobre indefensos ciudadanos cuyo mayor delito fue protestar por lo que se estaba elucubrando en el «vientre» del Congreso.
El objetivo de mínima es dar un ejemplo al que se anime a protestar en el futuro cuando el saqueo de la Nación se ponga en quinta velocidad, para lo cual los empresarios quieren «seguridad jurídica» y social. Jurídica la tienen, porque la Justicia está amañada al entramado macrista desde el 2016, con las principales salas de Comodoro Py, compuestas desde la Suprema Corte y las Salas de Casación puestas a dedo por Macri, como lo demuestra la absolución por falta de mérito del primo de Mauricio, Ángelo Calcaterra, que estaba hasta «las manos» en una causa de sobornos y coimas. De la Justicia nada podemos esperar.
Volviendo al tema de la represión infame, la violencia policial resulta funcional a la consagración de la protección de la «casta económica» de la extrema derecha. Estamos en presencia de la instalación de un sistema que solo va a concentrar en forma desigual las oportunidades vitales, económicas y culturales.
A mucha gente el futuro le asusta. Ya el miedo a lo por venir se «huele». No podemos como pueblo salir de la capacidad de autoengaño.
Y la pregunta es: ¿Hasta dónde estamos dispuestos a sacrificar lo particular en nombre de lo colectivo? La miseria no se puede esconder. Los efectos verdaderos del hambre no pueden maquillarse y lo sufrirán las generaciones venideras. Es la lección «in memoriam» de la conciencia de los límites, de la unión a los valores comunes, los que no se pueden recobrar si se pierden. La lucha por la Patria es una necesidad del alma…
Por ahí viene la Patria, con la mirada sucia,
sin una caricia, sin un cobijo…
Viene densa con el hambre a cuestas.
Gime y avanza, en el frío de la noche,
los enajenados, los expulsados,
los que no encajan, los que sobran tiemblan…
¡Los sueños se han poblado de lobos!
¡Oh, Patria mía!
Kiko
NEO-COLONIALISMO, todo para atrás, regresión, retroceso. Después y gracias a mala propaganda mentirosa de poderosos mentimedios culpan al Peronismo Justicialismo Kichnerismo, y es exactamente al revés, sembrando odio y división en el pueblo Argentino. Esto sucede hace más de 150 años
El refrán dice «Divide y gobernaras»