Concejo Deliberante

Tras la polémica sesión de ayer, en la que el bloque del PJ decidió levantarse e irse al ver que el oficialismo desconoció un acuerdo para evitar cambiar el nombre al recinto de sesiones, esta mañana, la concejal Carolina Amiano (PJ) confirmó a DIARIOJUNIO que el tema será tratado en la sesión de mañana. Se van a oponer a que la sala, denominada “Juan y Eva Perón” se modifique por “Federico Zorraquín”. El oficialismo decidió otorgarles una concesión: trasladar el cuadro de ambos líderes del Justicialismo que se encuentran en el hall del Concejo a la “Galería de la Democracia” ubicada en la antesala de las oficinas de los ediles. Pero esta mañana trascendió que el concejal Felipe Sastre (JxER) presentó otro proyecto que se suma al polémico pedido de cambiar Avenida de los Pueblos Originarios por Julio Argentino Roca. En este caso, quiere cambiar "Avenida Néstor Kirchner” por “Avenida Figuera Alcorta”. “Me acabo de enterar, dicen que ya lo habían presentado pero nunca lo habíamos visto”, admitió Amiano. Y allí no se termina. También está elaborando otro para borrar el mural al ex presidente santacruceño del Polideportivo “Víctor Oppel”.

Respecto de la sesión de mañana, Amiano dijo que propondrán un despacho como minoría donde piden que se denomine Federico Zoraquin a algún espacio del municipio que no tiene nombre aún y que no se toquen las designaciones actuales. “Pero ellos van a insistir con un proyecto un poco más conciliador”, indicó.

El cambio consiste en que las efigies de ambos ex mandatarios se trasladen a una de las salas del Concejo. Puntualmente, a la Galería de la Democracia. “Van a ser como los primeros líderes que se van a reconocer. Buscan una forma salomónica”, dijo.

Más adelante, Amiano sostuvo que hoy se enteraron de que hay intenciones de cambiar al nombre de la avenida que corre paralela al paseo lineal del arroyo Manzores. En efecto, Sastre quiere que se denomine “Avenida Figueroa Alcorta”. El proyecto está en comisión. “No lo van a meter ahora”, señaló la concejal. “Felipe va con esa idea de cambiar a todos los líderes políticos nuestros y sacarlos”, añadió.

Sastre confirmó que la iniciativa está en la Comisión de Sugerencias Ciudadanas pero, de acuerdo a los charlado con el presidente de la misma, el concejal Emmanuel Godoy (JxER), van a compartir una copia del proyecto a la prensa cuando esté en tratamiento a fines de julio. En consecuencia, no se tratará en estas semanas.

La iniciativa corre en paralelo con la intención de borrar la denominación “Avenida de los Pueblos Originarios” de la Costanera por “Avenida Julio Argentino Roca”. Amiano dijo que la intención ahora es dividir la Costanera para que una parte siga denominándose tal como ahora y la otra se reconozca al proceso cuestionado por genocida de la población indígena. “Vamos a ver como lo presentan pero no estamos a favor de que venga una gestión nueva y borre todos los nombres que ya están”, dijo.

Ayer, tras el levantamiento de la sesión, Sastre reiteró, en declaraciones radiales, que si el proyecto de renombrar la sala de sesiones como “Federico Zorraquín”, volvía a comisión, iba a añadir otras cuestiones como eliminar los símbolos partidarios de los edificios públicos. Y englobó en ese sentido al retrato de Eva Peron y al “mural enorme” de Néstor Kirchner en el Polideportivo, Víctor Oppel, en el Barrio Sarmiento.

Esta mañana, Sastre dijo que ese proyecto está en elaboración. En el año 2020 fue inaugurado  e impulsado por el movimiento denominado “Desarrollo y Realización Ciudadana”. “Al cumplirse 10 años de la partida hacia la eternidad del compañero y guía Néstor Kirchner para nosotros los movimientos populares, el 27 de Octubre no es una fecha que puede pasar desapercibida”, indicaron desde el movimiento social para luego acotar “Néstor vive en la militancia incansable de su juventud”.

Amiano dijo que el “Pacto de Julio” no tiene mucho sentido si siguen con la intención de borrar todos los nombres que identifican al PJ o si no se cumplen los acuerdos que habían alcanzado para las sesiones.  “El Pacto habla de dejar la grieta, las diferencias de lado, pero cambiar de nombre a los referentes del peronismo no aporta nada”, indicó. “Por eso, hoy le dijimos ‘Felipe, termina con esos proyectos y si querés presentar algo, presentá algo más que podamos dar un consenso y no borrar a uno para poner a otro’. Alguna calle que no tenga nombre o algún espacio donde se lo pueda hacer”, indicó. No obstante, dijo que esta mañana lo vio a Sastre con un discurso “un poco más conciliador”.

‘Batalla cultural’

Ayer, a la sesión asistió Paula Romero, presidenta del Centro de Estudiantes del Profesorado de Ciencias Sociales. Respecto del proyecto de renombrar a la avenida Costanera, recordó que hicieron una actividad a la que la mayoría de los ediles les dio las espalda. “Ellos como concejales tienen que escuchar mínimamente a la ciudadanía. En Sociales habíamos hecho una charla debate donde exponían las comunidades originarias. Habíamos invitado a todos los concejales. Se le envió una invitación individual a cada uno. Y fueron dos, Amiano y (Claudia) Villalba del PJ. El resto, que anticipadamente decían que iban a votar a favor, no fueron. Si su rol es representarnos, les pedimos mínimamente que nos escuchen”, dijo.

Charlando con una concejal, le confesó a Romero que ella “se debía a sus votantes”. Romero la rectificó.  “Quizás en el proceso de campaña debe responder a sus votantes. Pero una vez que acceden al poder, que ejercen en nuestro nombre, la idea es que respondan a toda la ciudadanía. Más allá del bloque al que pertenezcan, sus decisiones, lo que voten, me va a afectar a mi también”, indicó. Para Romero, hay un bloque de concejales que está tratando de dar una “batalla cultural” con ese “planteo constante de cambio de nombres” y de reivindicar “varias figuras”.

En una nota, titulada “Tapar el sol del ajuste al estilo Aramburu” publicada el 27 de marzo pasado en Pagina 12 se menciona el anuncio del vocero Manuel Adorni respecto de que se le cambiará el nombre al Centro Cultural Néstor Kirchner (CCK).  «Esto se inserta en la secuencia de chicanitas y maldades convertidas en política de Estado. Porque llamarle batalla cultural, es exagerar estas maniobritas de mortificación. Para eso les falta calado de elaboración conceptual. Aprendieron a lastimar en Twitter y han convertido eso en política de Estado», definió al respecto Martín Kohan, escritor y docente universitario.

Informe: Guillermo Coduri