El lugar elegido, el km 250 de la Autovía, se debe a que hay una gran cantidad de productores en los departamentos de Concordia y Federación. Smietuch dijo que en Los Charrúas, una ciudad de 600 personas, 200 se dedican a la apicultura. «Hay productores que han tenido que vender su movilidad para comprar comida. se ha puesto muy caro como producto de la sequía, del maíz y de la glucosa que se utiliza para alimentar las colmenas. Todo eso son costos muy elevados», indicó
«Somos los primeros que arrancamos con este tema porque se acerca el traslado de colmenas, la trashumancia, y el costo de los insumos se ha ido a las nubes y nos hemos quedado en un valor muy bajo en la miel que no compramos una botella de agua mineral», remarcó el productor en una nota a Canal 6 (Entre Ríos TV).»De tres tambores que producimos, dos son para el Estado y uno para nosotros», indicó.
Smietuch dijo que era dificil poder dialogar con los funcionarios del gobierno provincial. Por ello, apostaron a realizar la protesta para ver si logran ser escuchados y acompañados en el reclamo hacia el gobierno nacional.
Smietuch dijo que en el país se producen 75.000 toneladas de miel pero solo queda el 10 % en el país. El resto se exporta al exterior.
Mediante un documento dado a conocer, los productores señalaron que «la apicultura es una actividad federal, que cuenta con más de 19.000 apicultores inscriptos en todo el territorio argentino, con un notorio impacto en el desarrollo de las economías regionales, no solo dando trabajo a cientos de familias sino también a empresas que son parte de la cadena».
«La producción de miel alcanza en promedio unas 75.000 toneladas anuales a nivel nacional y se destina más del 90% al mercado de exportación convirtiendo al país en uno de los mayores exportadores a nivel global. Como muchos sectores de nuestra industria y del campo somos dejados de lado ¿Por qué lo decimos? Porque somos apicultores independientes que desde hace 4 años vendemos miel a granel, para exportación, al mismo precio, entre los $ 300 y $ 350 el kilo. Al exportar, se paga a dólar oficial, mientras que compramos nuestros insumos a dólar blue, siendo este nuestro principal problema: la brecha cambiaria», remarcaron.
«Explicando esto sencillamente, quien compra la miel desde el exterior deposita dólares, siendo convertidos en el banco central, entregando pesos al productor. Es así que mientras el precio de la miel sigue siendo el mismo, nuestros insumos aumentaron», sostuvieron.
Ejemplos:
– Glucosa, necesaria para alimentar las abejas en invierno, en febrero 2023 se pagaba $ 67 el kilo, hoy $ 275, necesitando aproximadamente 4 kilos por colmena.
– Azúcar, también necesaria para alimentar las abejas, la bolsa de 50 kg, en febrero 2023 costaba $ 2.500, hoy ronda los $ 39.000.- aproximadamente.
– Tambores, cuando siempre se pagaba U$ 35 dólar oficial, hoy en día se paga aproximadamente U$ 80 cada uno, también aproximadamente.
– Incrementos en los combustibles, necesario para el transporte de estas.
– Impuestos: 10% de retención a las ganancias.
– Incrementos de otros gastos fijos.
«Sumado a esto, la situación económica global, principalmente en Europa, y el clima de estos últimos años, donde la cosecha ha disminuido nos encontramos planteándonos disminuir nuestros personal, vender nuestros equipamientos y/o buscar otros rubros, porque no llegamos a cubrir nuestros gastos. Es importante aclarar que somos apicultores profesionales encargados de cuidar y mantener a las abejas en la sociedad, ya que sin ellas no existiría la polinización afectando la producción de cultivos esenciales para la vida humana».