Cuando P. Bullrich transitaba los meses que siguieron al fin del gobierno de Cambiemos, comenzó a escribir un libro que publicó en diciembre de 2020, «Guerra Sin Cuartel», donde lo cerraba con un decálogo sobre «Liderazgo en Seguridad», algo en que Patricia creía que podía dar cátedra, especialmente después de haberse mantenido en el cargo en la totalidad del gobierno de M. Macri.
En el cuarto punto, la exministra aconsejaba: «Estudie detenidamente el área sobre el cual va a trabajar y escuche a todos sus asesores sin prejuicios. En materia de Seguridad los errores se pagan caros.»
Seguramente su experiencia como exmontonera (Carolina Serrano, se hacía llamar) y experta como Ministra en reprimir a jubilados indefensos o atacar a «Mapuches» en su propio territorio en el sur patagónico, y sostener el operativo que terminó con la desaparición y luego hallado muerto en forma sumamente extraña de Santiago Maldonado, o el asesinato por la espalda de Nahuel por miembros de la Prefectura, le dan «chapa», ante la ausencia de líderes políticos de la fracción política que representa, en su forma más neoliberal, que tiene el derecho adquirido de presentarse como candidata a Presidente de la Nación.
El 3 de julio de 2021, Bullrich comunicó a través de las redes sociales que no sería candidata de JxC en las elecciones de medio término. En ese mismo momento se subió a la carrera presidencial. Sabía que era una apuesta difícil y que Rodríguez Larreta tenía la «estructura» y la «caja» de la Ciudad de Buenos Aires.
La pregunta de cómo financiarse rondaba desde hace tiempo. En mayo de ese año se había abordado el tema de los recursos en una asamblea del IEES, y Martín Siracusa, un economista que la había acompañado en su paso como diputada y como ministro, planteó la idea de hacer seminarios que terminaran con un almuerzo para intercambiar experiencias. La propuesta quedó formalizada en un acta del 02 de mayo de 2021.
Un año después, los diarios empezaron a hablar de los «almuerzos de Bullrich». El Cronista publicó que la exministra tenía estos encuentros culinarios con empresarios y pedía dólares. Una semana después, Perfil difundió que la exministra cobraba $50.000 pesos por almorzar con ella. El cachet de la «Dama de hierro» del PRO estaba en alza. A principios de 2023, Página 12 reveló que las veladas costaban $600.000 pesos y relataba que la exfuncionaria de Cambiemos había montado un «bunker» en el Hotel Palladio, en la Avenida Callao.
Estas publicaciones motivaron una investigación que inició la Inspección General de Justicia. P. Bullrich desvió dinero que recibió en un centro de formación hacia su campaña. De esa forma, financió viajes por las provincias e incluso una visita a Miami en diciembre del año pasado; pagó a consultores en comunicación y periodistas (?), e incluso le facturó ella misma más de $3.500.000 pesos a la asociación Civil que ella misma preside (?), algo que está prohibido. Por estas y otras irregularidades, el Ministerio de Justicia de la Nación dispuso la intervención del IEES… Pero cuando los inspectores llegaron al lugar en Av de Mayo 953, se encontraron que estaba cerrado por vacaciones.
El IIES no es una «criatura» pergeñada por Patricia. Sino de su pareja Guillermo Franco, muy adicto a hacer oscuros negocios con Israel en materia de Comunicación. Yanco, que es abogado israelí, tiene un portal de noticias, «Vis a Vis», junto con otro exfuncionario macrista, negacionista, y que ejerce como Vicepresidente del Museo del Holocausto, Claudio Avruj, y que en 2006 fundó el Instituto de Estudios Argentinos en Políticas Públicas (IDEAR). Luego ese instituto mutó y dio lugar a la creación de IEES. Para entonces, Bullrich estaba en plena gestión como Ministra de Seguridad de Macri.
En 2016, IEES consiguió magros recursos. En 2019, el Instituto tuvo ingresos por solo $741 pesos, pero Gastos por $297,364.49. La suerte empezó a cambiar con los seminarios y los almuerzos propuestos por Siracusa, a quien Bullrich define como un economista brillante. En 2021, recaudaron $5.743.632 pesos. Al año siguiente, el salto cuantitativo fue digno de batir algún récord: $85 millones de pesos en ingresos. De esos, 60 millones venían directamente de los «cursos» y de los almuerzos.
Los «cursos», que no se publicitaban en las redes sociales o en la web, sino que se promocionaban telefónicamente. Una manera de disimular el verdadero origen del dinero obtenido. Por eso, la IGJ le respondió que esa explicación era poco verosímil.
En 2022, se registraron 60 eventos en los que participaron unas 400 personas humanas y jurídicas.
Patricia Bullrich llevó al IEES a buena parte de su plana mayor en el Ministerio de Seguridad: El único que fue excluido fue Eugenio Burzaco, actual Ministro de Seguridad de H.R. Larreta. Burzaco había llegado a su cartera por un pedido de Marcos Peña, y que tenía pensado ser su «Sergio Berni», como había sido este último con Nilda Garré.
Hasta diciembre pasado estuvieron su marido, Yanco, y Gerardo Milman, su mano derecha en el Ministerio, y también después lo seguiría siendo. La salida de Milman puede explicarse por la exposición pública que tuvo después del intento de asesinato de Cristina Kirchner el 1 de septiembre de 2022. Un testigo declaró ante la Justicia haber escuchado a Milman, dos días antes del atentado, decir a dos mujeres, Carolina Gómez Mónaco e Ivana Bohdziewiez, que estaban con él en el bar, «Cuando la maten voy a estar camino a la costa».
En mayo pasado, Bohdziewiez se presentó ante la Fiscalía para declarar que un perito había borrado su teléfono, y uno de Gómez Mónaco y manipulado el de Milman en noviembre pasado. Y el dato relevante de lo anterior es que la mujer que hacía unos meses antes había estado a cargo de llevarle la agenda del Diputado del PRO, dijo que «el borrado» se produjo en unas oficinas de Avenida de Mayo al 953, el mismo domicilio donde el IEES de Bullrich tenía las oficinas de su fundación (todo tiene que ver con todo).
Volviendo a la «mesa de recaudación de fondos”, hay que decir que Martín Siracusa es a su vez el Secretario del IEES. Durante la era Cambiemos, fue el Subsecretario de Coordinación, Planeamiento y Formación del Ministerio de Seguridad. Este funcionario intercambió varios llamados entre julio y agosto de 2016 con el falso abogado Marcelo D’Alesio, quien además le envió su CV para esa fecha, tal como lo reconstruyó el juez Alejo Ramos Padilla durante la causa de espionaje en Dolores.
Silvia Turetzky es la Tesorera del IIES y fue la Directora Gral. de Administración del Ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich. También ejerce como tesorera de Unión por la Libertad, el Partido de Bullrich. Entre los vocales están Sebastián García Donofrio, que se desempeñó como Director de Presupuesto Y Contabilidad, y Federico Saettone como Secretario Ejecutivo. También están el Politólogo Alberto Fohrig, que es Vocal y Secretario de Coordinación. Dentro de la Comisión Directiva se encuentra Gastón Schulmeister, que fue Director Nacional de Cooperación Internacional de Patricia en Seguridad y dirige el Departamento contra la Delincuencia Organizada Transnacional del nada menos que el ultraderechista y uno de los inspiradores del golpe de Estado en Bolivia contra Evo Morales, el impresentable Luis Almagro, el uruguayo que preside la OEA y que es un vasallo de Washington.
«Almorzando con Patricia»
El 12 de abril, Patricia Bullrich y su hombre de confianza en Economía, encabezaron un almuerzo en el Hotel Hilton de Puerto Madero. El evento fue patrocinado por la Cámara de Comercio y la Industria Franco-Argentina (CCI). El cubierto para los socios costaba $28.000 pesos, y para los no asociados, $40.000. Quince días después la IGJ presentó la denuncia contra la Presidenta del PRO. El organismo había detectado varias transferencias que hacían referencia a almuerzos o cenas. Una de ellas fue la de Ansal Refrigeración, una importadora, que aportó $90.000. También giró en ese concepto la misma suma, Rolando Ahualli, ligada a la papelera Massuh de Quilmes. También figura en la nómina Facundo Manzoni de Córdoba. Manzoni es productor agropecuario y su caballito de batalla es no a las retenciones. Otro complejo muy importante es el Establecimiento «Las Marías», fabricante de las mayores marcas de yerba mate, que depositaron $2.000.000 de pesos. Estos son solo los aportes formales. La yerba mate de esta empresa tiene nada menos que el 42% de la producción y son los principales responsables del aumento del 26% del producto, cuando el acuerdo con el gobierno era del 5%. Uno de los casos más resonantes de aportes informales o encubiertos fue el de los hermanos Patricio y Juan Neuus, dueños de WOODEN ENERGY, titulares nada menos que de la firma que hace la VTV en Capital Federal y dueños de varias bodegas. Los Neuss pusieron nada menos que $10 millones de pesos para la campaña, gane quien gane en la interna. Pero para demostrar que son «caballeros», no podían permitir que la «dama de hierro» de Cambiemos, luego del acompañamiento al nuevo gobernador de Chubut, Ignacio Torres, trajeran a la candidata en su avión privado de vuelta a la Capital, no sin antes reservar un asiento en la cena de campaña.
Otro de los aportantes es Paolo Roca de Techint, que a pesar de tener la mayor tasa de ganancias en este país, la hizo durante gobiernos justicialistas. Solo el odio de clase puede explicar tales contradicciones.
Como vemos, las campañas políticas no se financian en una colecta como la de Cáritas, sino por quienes esperan verse recompensados con decisiones políticas a la hora de festejar champagne la hipocresía de la política.
HUGO
A ustedes los kirchneristas no les queda más que el desprestigio al rival, porque en su propio banda no tienen nada que mostrar.
Poroto
Persona maligna, está ex guerrillera, nena bien de papá, de extrema izquierda, paso a la extrema derecha, y o casualidad, nunca la tocaron, siendo guerrillera, ni nadie se mal acuerda, de ello. Pero obvio, es porteña, gallega y de abolengo BULLRICH, Luro Pueyrredón, tres prestigiosas avenidas de la capital federal. Y a su vez, muy ignorante y bolasera, dice, cualquier disparate, de lo que hable. Y no escribo por odio, ni rencor, pero razonemos un poquito, con algo de sensatez y cordura. Y no muy lejos está el otro gallego Rodríguez Galleta, también de abolengo porteño, de uñas largas, versero, chantapufi, que no sabe, nada de lo que es nuestro país. Son lo mismo, no debemos permitir, que está gente, cualquiera de los dos, llegue nuevamente a destruirnos a los Argentinos, y lo que generaciones, han construido con esfuerzo y sacrificio.
Leticia
Lean, aquellos que le creen a esta gente nefasta (JXC). Y dejen de decir que sólo los peronistas son los ladrones, porque ni siquiera lo son.
Mario
No vayas hasta Bullrich, pregúntale a los peronistas y casi peronistas de acá de dónde la sacan.