La empresa adjudicada, Brunel Construcciones, debía completar la primera etapa del proyecto en 90 días, pero la demora ya supera los cuatro meses. Uno de los sectores del techo aún no ha sido intervenido y tiene pendiente la colocación de las nuevas pizarras. La empresa argumenta que el proveedor del material está demorado, pero la incertidumbre crece ante la falta de avances y la situación financiera de la contratista.

El mayor problema estructural detectado en las últimas lluvias torrenciales es que la zinguería tuvo importantes filtraciones desde el techo hasta el primer piso en algunas áreas del edificio. Estos inconvenientes agravan la situación de una obra que, tras casi dos años de espera desde el primer desembolso de fondos nacionales, sigue sin completarse. El segundo desembolso, de aproximadamente 20 millones de pesos, no puede ser gestionado hasta que la primera etapa esté finalizada.

Una adjudicación directa con serias dudas

En julio de 2024, la Municipalidad de Concordia adjudicó de manera directa el contrato a Brunel Construcciones, una empresa con domicilio en San Lorenzo 677, Corrientes, a cargo de Raúl Humberto Brunel. Según información del Banco Central de la República Argentina (BCRA), la firma y su titular se encuentran clasificados en las categorías de deudores de «Alto Riesgo» (Situación 4) e «Irrecuperable» (Situación 5), con deudas que rondaban los 30 millones de pesos en septiembre pasado.

La deuda de Brunel en Septiembre de 2024

La deuda de la empresa que se ocupa de restaurar el Museo Arruabarrena al día de la fecha

Entre los pasivos registrados, la empresa mantiene al día de hoy una deuda de $25.632.000 con el Banco de la Provincia de Corrientes, una deuda en Mercado Libre por $223.000 y un cheque rechazado por $210.000. Estas categorías del BCRA indican un alto riesgo de insolvencia y la imposibilidad de recuperar los montos adeudados.

A pesar de estos antecedentes financieros, el 16 de julio de 2024 se ratificó el contrato por un monto de $36.704.783,23, con un plazo de 90 días a partir del 19 de agosto de 2024.

El proceso de restauración del Palacio Arruabarrena ha estado marcado por continuas demoras y cambios en la adjudicación de las obras. Inicialmente, la empresa Ava Construcciones fue seleccionada para llevar adelante el proyecto, pero en agosto de 2024 el municipio decidió rescindir el contrato de mutuo acuerdo debido a la falta de avances.

Desde entonces, la nueva empresa contratada tampoco ha logrado cumplir con los plazos establecidos. A pesar de que la Dirección de Arquitectura de la Subsecretaría de Obras Públicas afirmó en un informe al Concejo Deliberante que Brunel Construcciones fue elegida por su especialización en restauración, no existen registros públicos que respalden esa afirmación.

Un deudor de “alto riesgo» e «irrecuperable” se adjudicó 36 millones de pesos para la puesta en valor del Palacio Arruabarrena

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