El conflicto tuvo lugar esta mañana en las oficinas del Centro Cívico de Concordia, donde los trabajadores se manifestaron con cánticos y abucheos, mientras Schatenoffer permanecía encerrado en su oficina. Sobre lo ocurrido, explicó Rapuzzi, «nosotros veníamos gestionando una reunión con el secretario del área para discutir los problemas que enfrentamos y ya había un expediente presentado por parte de los trabajadores, en el cual se detallaban las inquietudes que queríamos tratar. Me comuniqué personalmente varias veces con él para solicitar el encuentro y finalmente nos convocaron el jueves pasado a las 9:30 de la mañana»
Sin embargo, «al llegar a la oficina del secretario se negó a recibirnos argumentando que la conversación estaba prevista solo conmigo y no con el resto de los delegados. A lo que le aclaré que si bien fui yo quien gestionó la reunión, era para todos los trabajadores y, especialmente, los representantes del gremio. No obstante, no quiso reunirse con nosotros», explicó. Ante la negativa, agregó Rapuzzi, los trabajadores decidieron convocar a una asamblea junto a otro sindicato – el de Trabajadores y Empleados Municipales de Concordia (STEMC) – que tenían reclamos similares.
«El principal motivo de la protesta es el incumplimiento de un convenio laboral que estipula el pago de una suma extra a cambio de una hora de trabajo adicional cuando la superioridad lo requiera», detalló el dirigente sindical, y agregó: «El problema es que ese pago se está realizando de manera discrecional. O sea, la secretaria de Schatenoffer decide quién cobra y quién no, a pesar de que todos los trabajadores cumplen con sus horas de trabajo tanto en oficina como en territorio», denunció. «Debe quedar en claro que nosotros no estamos en contra de que se pague solo a quienes trabajan, como dijo el intendente, sino que estamos en contra de que no se pague a quienes realmente cumplen con sus funciones.»
Además de la falta de pago, los trabajadores denuncian un clima laboral «hostil, con maltratos y persecuciones» en el área, y afirman que «el personal se siente acosado y perseguido». Y esta situación «no solo ocurre en el Área de Desarrollo, sino en muchísimas dependencias municipales», insistió Rapuzzi.
Tras el conflicto, el intendente Azcué se manifestó con una publicación en redes sociales y aseguró, entre otras cosas, que “no puede ser que por el solo hecho de hacer que se controlen las horas extras de los colaboradores municipales nos quieran correr con medidas de fuerza. Simple: el que no trabaja no cobra”. A lo que el dirigente gremial respondió: «acá no se le está pagando a quienes sí cumplen con sus tareas y se persigue a quienes reclaman». No obstante, agregó, «nosotros no creemos que el intendente sea quien ordene estas persecuciones sino que son decisiones de algunos funcionarios. Sin embargo, él debe garantizar que se respete el convenio y que no haya injusticias».
Mas adelante, y consultado sobre el apoyo que los empleados municipales brindaron a la actual gestión en las últimas elecciones, Rappuzi respondió: «Muchos compañeros apostaron por este gobierno y no sé si hoy están arrepentidos o no. Lo que si se es que hemos tenido conflictos con gestiones anteriores pero nunca aprietes, ni persecuciones ni amenazas de traslado, y no vamos a permitir que eso suceda ahora. Ellos por ahí tienen eso de que «ahhhh usted vienen de 40 años con costumbres, privilegios, la vieja escuela, etc», y la verdad es que ya es hora de que cambien el discurso porque nos tienen cansados con eso», criticó, y concluyó. «Ese discurso ya no es una excusa para que puedan poner en duda el reclamo de los trabajadores, nosotros vamos a defenderlos cualquiera sea el gobierno de turno».