Emergencia edilicia: salón clausurado, filtraciones de agua y desprendimiento de mampostería en la Escuela Normal

En el salón de actos no se puede caminar por las galerías laterales superiores. “La madera del piso está en estado de putrefacción por lo que no podemos transitar”, dijo Salud. A los costados del escenario, se encuentran los bastidores clausurados. En la parte superior, por donde antiguamente se descendía por una escalera hasta los vestuarios luego cerradas, hay un hueco en el techo y los cables de electricidad están colgando.

Los profesores se ven imposibilitados de realizar muchas actividades pedagógicas habituales para las que se usaba el salón. “Eso nos lleva a trasladarnos a otras instituciones y abonar el costo que las otras instituciones que nos cobran”, dijo Salud. “Tenemos que estar pagando para realizar ese acto escolar en otra institución”, añadió. Además, remarcó que se está perdiendo el sentido de identidad por la institución. “El alumnado debe trasladarse a otras instituciones”, sostuvo Salud.

Romina Piñeyro, profesora consejera del Profesorado de Inglés de la Normal desde hace 18 años, indicó que ha visto el deterioro paulatino de la escuela a lo largo del tiempo. En el Profesorado donde dicta clases suelen realizar mucha producción artística como exposiciones y obras de teatro en inglés. “Se sintió esto de tener que trasladarse. El trasladarse tiene que ver con cuestiones de organización. Con no tener ese lugar donde pueden ensayar cuando tiene una hora libre. Este es el lugar de encuentro. Hemos tenido que salir a la siesta o de mañana a ensayar en un horario en que ellos no cursan y algunas son mamás y otros tienen trabajo. No se puede pedir que descuiden sus trabajos y menos ahora con la crisis que estamos atravesando”, dijo Piñeiro.

A su vez, Piñeyro remarcó el esfuerzo de todos los alumnos que realizaron ferias de platos y ventas de pizzas para poder pagar la colación de quienes se reciben este año en el Centro de Convenciones. “Nos hicieron precio pero igual, son montos que, para el bolsillo del docente, son montos importantes y ni que mencionar para los alumnos”, dijo.

Lo paradójico es que la escuela Normal en muchas oportunidades prestó su salón de actos a otras escuelas para que pudieran realizar sus colaciones o al Coro de la ciudad. “Ahora tenemos que salir a pagar porque está en desuso por el no mantenimiento del salón”, indicó Salud. La otra posibilidad es realizar una colación en el patio que da a calle 25 de Mayo pero dependen del estado del tiempo. El año pasado, en diciembre, hubo varios días de lluvia consecutivos que les imposibilitaban la colación de los estudiantes de secundaria. En la dirección de la escuela padecían una situación de  impotencia por no poder encontrar una solución hasta que, desde el Colegio Nacional, les prestaron el gimnasio cerrado.

Galerías con filtraciones

Pero el salón de actos no es el único lugar con problemas edilicios. Carina Schonfeld, rectora de la Normal, explicó que en la última lluvia observaron filtraciones  en las galerías de calle Alem. Y también en la galería se hicieron los últimos arreglos, a principios de año, en la parte alta del edificio sobre calle Quintana, de cuyo techo cayó un trozo de mampostería el año pasado. “Con las últimas lluvias comenzaron las filtraciones”, indicó. Pero lo que más les preocupa es que el agua ingresa en las cañerías de la instalación eléctrica.  “Por ahí cae toda el agua; es un gran riesgo”, expresó.

La rectora dijo que se están perdiendo espacios de suma importancia. “La escuela siempre fue muy abierta a la comunidad, fuimos muy empáticos y hoy sufrimos el tener que cerrarlo”, indicó. A su vez, admitió que sienten que les falta el reconocimiento que supo obtener la Escuela a lo largo de su historia.

Proyectos sin presupuesto

Por otra parte, Schonfeld mencionó que el año pasado, en la Dirección de Arquitectura, les presentaron un proyecto basado en la recuperación del Salón de Actos. “Es una reparación completa: cambiar techos, sacar la chapa completa, ampliar las canaletas, reparación de butacas que están en muy mal estado, reparación de los pisos que se fueron deteriorando por la entrada de agua y al estar cerrado, con tanta humedad, comienza a deteriorarse, cableado eléctrico nuevo”, recalcó.

Este año volvieron a hablar con el director de Arquitectura, les mostraron todo lo que les habían presentado. “Se lo enviamos nuevamente pero hasta ahora no hemos tenido respuesta”, dijo. ¿Hay presupuesto? “No nos dijeron nada, solamente tienen el proyecto y se iba a tratar de trabajar en eso. Hasta ahí llegamos. Yo confío totalmente que se va a reparar”, indicó.

La rectora sostuvo que sería muy importante que las autoridades pudiesen avanzar con el proyecto ya que la escuela tiene cuatro niveles de educación de lunes a viernes: nivel inicial, escuela primaria y secundaria y los diferentes profesorados. “Somos 3.000 personas que transitamos entre profesores, estudiantes y personal de maestranza”, sostuvo.

Ninguna obra en 2024

Miguel Stegbañer, secretario gremial de Agmer Concordia, remarcó que la Normal es una de las primeras escuelas de la ciudad y por lo tanto es emblemática. “Hay que hacer una intervención integral y una puesta en valor de ese edificio. Si bien se hicieron algunas intervenciones en años anteriores pero para nada alcanzan”, indicó.

El gremialista mencionó la existencia del proyecto de reparación que ya viene en carpeta desde el gobierno anterior. “Hay que exigir que esta gestión pueda concluir con ese proyecto”, mencionó. Hasta que eso no se ejecute, van a seguir manifestándose los problemas descriptos. “Cuando hay lluvia, se llueve en su interior; hay parte de la mampostería que está en estado deplorable. Por lo tanto, el estado de esa escuela es fundamental porque es una institución que abarca todos los niveles”, indicó.

Si se amplía la mirada, el problema es más acuciante y comprende la ausencia de políticas estructurales para el mantenimiento de los edificios escolares desde el gobierno provincial. Stegbañer remarcó que en 2024 no se ha hecho ni una obra de importancia en materia de infraestructura escolar. “Si bien se han hecho algunos mantenimientos menores por parte de la Departamental de Escuelas, las obras de infraestructura importante no se realizan”, expresó.

Stegbañer mencionó varias escuelas secundarias y primarias que esperan su edificio propio como la N° 7 “Mariano Moreno”, la N° 22 Ricardo López Jordán, la N° 77 “Néstor Kirchner,  la N° 78 “Brazos Abiertos” y la N° 76 “Madre Teresa de Calcuta”.

A su vez, remarcó que hay otras que necesitan una intervención dado que se están deteriorando año a año. “Hay proyectos de infraestructura de la Dirección de Arquitectura pero han quedado en carpeta y no se han ejecutado”, mencionó. “No hay inversión, no hay fondos, no hay plata. Esas son las respuestas que nos dan”, remarcó.

Pero la espera no puede ser eterna. “Mientras más tiempo pase, más se va a agravar la situación”, dijo. Si bien las escuelas siguen funcionando “a como dé lugar”, el gremialista remarcó que  hay situaciones puntuales que sobrepasan a la capacidad de respuesta de una cooperadora escolar o alguna cuadrilla que pueda resolver cuestiones puntuales. “Muchas escuelas resuelven temas por la propia con ayuda de la cooperadora o de papás que son especialistas en electricidad o sanitarios y dan una mano pero esa no es la solución de fondo”, remarcó.