Aguirre fue procesado por tres hechos de abuso sexual simple consumados, uno en grado de tentativa, y por maltrato hacia subalternos. Además, se le impuso un embargo millonario como parte de las medidas adoptadas en el proceso judicial.
La denuncia que dio inicio al caso fue presentada por una joven que en ese momento estaba bajo el mando del ex teniente. Su identidad se mantiene en reserva para garantizar su privacidad. En su relato, la denunciante detalló los abusos sufridos mientras cumplía funciones en el Ejército, lo que permitió abrir la investigación en la Secretaría Penal del Tribunal.
Entre las pruebas aportadas al expediente, figuran testimonios de diversas autoridades y personal militar que contribuyeron a consolidar las evidencias en contra del acusado. También se incorporaron antecedentes del procesado por hechos similares, lo que reforzó los argumentos de la fiscalía.
La jueza Ramponi resaltó la valentía de la denunciante al exponer los hechos, así como la coherencia y consistencia de su relato durante el proceso judicial. Además, valoró la actuación de las autoridades del Ejército, quienes brindaron apoyo a la víctima mediante las áreas de género correspondientes, facilitando recursos y acompañamiento para abordar la situación.
Como resultado de estos hechos, el Ejército Argentino decidió expulsar a Aguirre de la institución, una medida adoptada en consonancia con los principios éticos y valores que rigen a las fuerzas armadas. Desde la institución señalaron que la decisión refleja un compromiso con la erradicación de cualquier tipo de conducta que atente contra la dignidad y el respeto hacia sus integrantes.
Fuente: Infobae/concordia policiales