«El Gobierno ‘cerró la canilla’ de forma que este semillero de conocimiento, que es la universidad pública, se ‘seque’ progresivamente», reflexionó el Secretario General de FAGDUT, Norberto Heyaca, y se quejó: «Cualquier nación que quiera progresar nunca puede tener a sus docentes con salarios bajo la línea de pobreza».
Sobre el tema salarial también se refirió el Secretario Adjunto, José Gabriele, quien expresó: «Participamos de una paritaria que está totalmente rota desde enero».
«Rompieron todo lo que habíamos construido en estos últimos 30 años», enfatizó Gabriele, y lo ejemplificó con el tema de las garantías salariales que fueron anuladas. «Hay docentes que no recibieron actualización salarial en todo lo que va del 2024», marcó el dirigente.
Asimismo, tampoco se ve que la situación a futuro pueda mejorar, sino más bien todo lo contrario. «El Presupuesto 2025 está disminuido prácticamente al 50% de lo que solicitaron los Rectores y Rectoras en el Consejo Interuniversitario Nacional», indicó José Gabriele, y dijo que esto «le va a pegar directamente al salario de los trabajadores universitarios». Al respecto, el Secretario Gremial de FAGDUT, Ricardo Mozzi, dijo que es incomprensible que el Gobierno nacional hostigue así a la universidad nacional: «Todos necesitamos de los profesionales que forma la universidad pública en algún momento de nuestra vida», declaró.
Por este motivo, desde la federación sindical que nuclea a todos los docentes de la UTN señalaron que «esta situación crítica de la Universidad Pública se debe resolver integralmente: presupuesto para funcionar, becas para estudiar y salarios dignos para los trabajadores universitarios».
Además, se suma a esta difícil situación el fantasma del veto a la Ley de Financiamiento Universitario, que el presidente Javier Milei ya ha adelantado que va a realizar, como lo ha hecho con la Ley de Movilidad Previsional.
«Vamos a salir a la calle fundamentalmente para pedirle al Presidente que no vete esa Ley que nos acomoda, pero solo un poquito, porque sería para el último trimestre», opinó José Gabriele, y dijo que la movilización también es para pedirle a los diputados y diputadas que no acompañen dicho veto.
Al respecto, Heyaca explicó que el costo de dicha Ley al no incluir retroactivos «ronda el 0,14% del PBI», por lo cual -dijo- «se trata simplemente de revisar prioridades».
En este contexto, la semana próxima, precisamente el 2 de octubre, se realizará una marcha nacional y se espera que sea masiva como la que se realizó en abril pasado, donde más de 1 millón de personas salieron a las calles en todo el país para defender las universidades nacionales. «Queremos que la universidad siga siendo pública, de calidad y sin arancelamiento», manifestó Ricardo Mozzi.
«Volvemos a las calles para hacerle escuchar nuevamente al Gobierno nacional el pedido de la sociedad toda, que está a favor de nuestras universidades nacionales, además de la ciencia y la investigación nacionales», concluyó el titular de FAGDUT, Norberto Heyaca.
«Estamos en plena organización de dicha marcha, y en contacto con el Gobierno de la Ciudad, para que la movilización sea ordenada», destacó Mozzi para la tranquilidad de los asistentes al acto central a realizarse frente al Congreso Nacional.