El presidente del Directorio Obrero de Iosper, Fernando Cañete, explicó que se recurrió a la justicia “para garantizar el servicio y no perjudicar ni a los afiliados y, menos aún, a los sanatorios”, y apuntó que en este plazo “se dialoga con anestesistas para ver la posibilidad de tener un grado de acercamiento para firmar convenios de manera individual”.
Al respecto, Cañete recordó que el 22 de septiembre de 2023 se creó una Comisión de Seguimiento, “que resolvió el 90 % de los planteos que realizó la Asociación”. Es decir, “se resolvieron prácticas realizadas por anestesistas en internaciones y se definió el pago directo de honorarios, que antes se liquidaban cuando los sanatorios presentaban la facturación, por lo que se agregó un acto administrativo más para responder a su reclamo, para que no esperen la liquidación de los sanatorios”, dijo.
Sin embargo, el conflicto surgió a partir del pedido de aplicación del Nomenclador Nacional, “que fue rechazado, ya que dispone adicionales que no son lógicos, es decir, que por cada práctica querían un adicional porcentual distinto por ejemplo: de horario nocturno (un 35 por ciento); por fin de semana (50 por ciento); feriado (50 por ciento); por edad extrema del neonato (50 por ciento); pre pediátrico (40 por ciento); pediátrico (30 por ciento); geriátrico (30 por ciento); y pacientes de obesidad mórbida, con un índice de masa corporal mayor a 40, (un 175 por ciento)”.
Ante el fracaso de las negociaciones, la Asociación denunció el convenio, por lo que dejaron de representar a sus asociados y dieron libertad de acción a los anestesistas, “por lo que ahora, en estos tres meses Iosper habla con profesionales de toda la provincia para para firmar convenios de manera individual, no obstante, a los fines de poder seguir garantizando el servicio y no perjudicar ni a los afiliados se interpuso la cautelar”.