El proyecto que se aprobó fue gestado a partir de una iniciativa nacida en la gobernación de Gustavo Bordet en 2022 que no fue sancionada. «Pasó todo el 2023 que fue un año electoral y no se trató», indicó. En marzo de 2024 fue retomado ya que la ley existente en esa materia es de 1980, sancionada en épocas de dictadura. Rossi destacó el trabajo realizado en la Comisión de Medio Ambiente que preside en el tratamiento del proyecto. «Desde el 24 de marzo hasta el 2 de octubre vengo convocando a los diferentes actores que están involucrados en este tema complejo, básicamente salud, producción y ambiente», destacó.
«Lo dimos vuelta al proyecto. Si uno compara el de Gustavo Bordet con el que se aprobó, tiene un montón de diferencias conservando el espíritu de la cuestión productiva», remarcó. Rossi subrayó que el proyecto que tiene media sanción coloca a la provincia «a la vanguardia a nivel nacional» en esa materia comparada con otras provincias agropecuarias.
Distancias de seguridad
Rossi explicó que fueron fijadas en la legislación de manera variada. «El proyecto tiene más de 20 distancias ¿Por qué? Porque hace referencia a la zona, si es una ciudad, una escuela, si es un área sensible con o sin personas y, después, a la modalidad de aplicación: si es manual con mochila, si es un drone, si es terrestre con un mosquito o si es aérea en avión», indicó. Por ende, si se coloca en una tabla los lugares (escuelas, localidades, etc.) y en otra la modalidad, el resultado es una tabla con una veintena de distancias de aplicación.
¿Cuál es la distancia que se debe respetar respecto de una escuela? Para responder esa pregunta, el legislador dijo que se debe tener en cuenta que clase de escuela y qué tipo de aplicación se utilizaría. «No es lo mismo para una escuela que venga un avión, una mochila, un mosquito o un drone», indicó.
Por otra parte, remarcó que se establecieron tres referencias en el texto. Zona de Exclusión: se prohíbe la aplicación de agroquímicos. Zona de amortiguación: se habilitan algunos agroquímicos, «los menos tóxicos». Zona de libre aplicación: se puede aplicar cualquiera aprobado por el Senasa. Los radios de exclusión varían entre 15 y 500 metros, dependiendo de la proximidad a asentamientos y de las características del producto.
Rossi destacó que el solo hecho de colocar distancias en una ley es «novedoso» si se compara con otras provincias o si se tiene en cuenta la «maraña» de resoluciones existentes en Entre Ríos.
Al mismo tiempo, el legislador hizo referencia al fallo del 2023 del Superior Tribunal de Justicia de Entre Ríos que declaró la inconstitucionalidad de dos normas de la Subsecretaría de Asuntos Agrarios y Recursos Naturales que fijaban una distancia de seguridad de entre 50 y 100 metros para el uso de agroquímicos en zonas cercanas a viviendas y cursos de agua, y puso como distancia más de 1000 metros. Rossi explicó que se trató de una sentencia dictada para la localidad de Colonia Ensayo (cerca de Paraná) referida a un loteo inmobiliario en una zona agrícola. «Lo que dice el fallo es que para esos loteos, mientras no haya una nueva legislación, prima 1.095 metros para ese lugar», expresó. «No es que dice que van a regir esos 1.095 metros para toda la provincia porque no habría donde producir. Es un delirio poner más de 1000 metros y no aclarar a que se está refiriendo», explicó.
Toxicidad y exposición
Rossi indicó que los productos que se utilizan en los campos son tóxicos,. Pero sostuvo que una cuestión es la toxicidad y otra es la exposición. En ese sentido, remarcó que la misma se produce por la deriva de la aplicación ya sea por acción del viento o del agua. Para conocer que efectos tienen sobre la salud, sostuvo que invitaron a los toxicólogos a nivel país. “Hay una red de toxicología a nivel nacional que depende del ministerio de Salud de la Nación. Esa gente nos dijo que hay un registro de cáncer a nivel nacional que dice que no hay aumento significativo de casos». Además, mencionó que en la Red se reciben las denuncias por la utilización de agroquímicos. “Y dicen que son muy marginales las denuncias que hay, comparados con los raticidas o el ‘Off’, los repelentes para mosquitos”, sostuvo.
“¿Que quiero decir? Que ellos no dicen que pueden causar daño. Lo que dicen es que, en función de las denuncias y de los casos de cáncer, que no ven diferencias significativas”, remarcó el legislador.
Rossi mencionó que hay casos como el de la docente rural Estela Lemes, quien padece una enfermedad causada por las constantes fumigaciones con agrotóxicos que caen sobre la escuela en la que trabaja N° 66 Bartolito Mitre de la localidad de Costa Uruguay Sur (departamento Gualeguaychú). El legislador sostuvo que Leme fue invitada a la comisión que preside para que cuente su caso. Rossi recalcó que se enfermó porque las fumigaciones “se hicieron mal”.
El legislador admitió que hay gente que trabaja en escuelas rurales o semi-rurales que tienen temor y es comprensible. “Hay que ver las causas. Es todo muy complejo”, indicó. Pero, para aventar cualquier duda, acentuó que se incorporaron cuestiones que había solicitado el sindicato docente Agmer que no estaban contemplados en el proyecto de Bordet ni en otras provincias. Una de ellas es la vigilancia epidemiológica. “Se incorporan las personas afectadas al plan de vigilancia epidemiológica”, dijo. Se añadió un protocolo de limpieza para las escuelas con elementos que deben ser aportados por el estado. Otro protocolo de actuación ante el caso de que haya personas afectadas.
Asimismo, se incluyó la obligación de establecer cortinas forestales en los perímetros de las 780 escuelas rurales existentes en toda la provincia. Rossi sostuvo que los arboles servirán como barrera ante las posibles derivas de las fumigaciones.
También se incluyó un mapa obligatorio público de todas las escuelas rurales de la provincia. «Que todas las personas puedan entrar, sobre todo la gente que arma las recetas para las aplicaciones, que pueda ver cuál es el límite de cada escuela rural”, enfatizó.
Otro aspecto que se contempló es la contratación de una empresa por parte de la provincia para hacer un monitoreo de la situación ambiental. Y añadió que los municipios deberían encargarse de fiscalizar para que no sea solo la Provincia la que se encargue de controlar.
Más adelante, Rossi sostuvo que se el régimen sancionatorio es “mucho más duro” que la legislación actual.
Sustentabilidad agrícola
Rossi dijo que se debe contemplar la salud de las personas, la biodiversidad del ambiente pero, a la vez, deben contemplar la sustentabilidad de los productores. “La Provincia necesita que la gente produzca para que puedan seguir trabajando en los campos porque está el tema del desarraigo rural que es otro gran tema”.
En el proyecto de ley se incluyó un artículo donde se establece la posibilidad de poder otorgar incentivos fiscales y beneficios económicos a los productores rurales que reemplacen agroquímicos por insumos naturales. Pero sostuvo que no es una cuestión sencilla reemplazar de un día para el otro en campos donde se vienen aplicando desde hace más de dos décadas agroquímicos. Y remarcó que es central la participación del INTA (Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria) para señalar que tipo de semilla se puede utilizar en tal tierra y en tal época del año para producir en forma natural.
Rechazo de legisladoras y ecologistas
Rossi sostuvo que en la Cámara Baja se aprobó con la adhesión de todos los bloques. Pero eso no es así. Las diputadas del PJ Laura Stratta, Lorena Arrozogaray, Stefania Cora, Silvia Moreno y Andrea Zoff (menos Mariel Ávila que estuvo ausente) no ratificaron el proyecto de ley. El legislador dijo que eso fue llamativo. “No explicaron a nadie porque no votaron”, dijo. Además recalcó que no propusieron ninguna alternativa, ni siquiera durante el trabajo en comisión donde algunas legisladoras participaron. Rossi dijo que el proyecto se basó en el que presentó Stratta cuando era vicegobernadora de Bordet. “Este es 100 veces superior”, dijo. Asimismo, remarcó -en referencia a Arrozogaray- que hay quienes fueron viceintententa (en este caso de Gualeguaychú) y “no propusieron ni medio metro de distancia en sus ciudades”. “No hicieron nunca nada y ahora se oponen”, manifestó.
El legislador también fue crítico del Foro Ecologista de Paraná. Rossi dijo que lo único que quieren es prohibir las fumigaciones. “No presentan ninguna alternativa y eso no es viable”. “Agreden por las redes. Pero no dicen cómo se va a producir. Son gente de clase media de las ciudades y no conocen de la producción”, indicó el legislador.
Ante las acusaciones de ser permeable a los intereses del sector agropecuario, Rossi dijo que en las actas de la comisión que preside se puede ver el registro de quienes fueron invitados a participar y no van a encontrar a nadie de alguna empresa grande del sector agropecuario. Enfatizó que solo invitaron a pequeños y medianos productores, como tamberos, productores apícolas, etc. “Después quieren que los docentes cobren más pero no dicen cómo. Y si el Estado no recauda mas, no sé de dónde va a sacar la plata para hacer escuelas y hospitales”, sostuvo.