“Es como que se van quedando por debajo de la inflación. Eso creó un desfasaje y hoy una consulta de una prepaga tiene el mismo valor que una consulta de una obra social. Antes de las Paso se elaboró una propuesta donde se proponía, valga la redundancia, un bono compensatorio que nosotros le llamamos arancel compensatorio inflacionario. Las prepagas en ese momento no aceptaron”, recordó Rivas a “Tarea Fina (Radio Ciudadana-FM 89,7).
No obstante, después de las Paso, se frenaron los aumentos a las prepagas. Por ello, se tomó la medida del bono adicional, de $ 2.000, que representa un aumento del 20 % para tratar de compensar la inflación. Rivas sostuvo que el bono compensatorio se ha impuesto en todo el país.
En cuanto a las obras sociales, dijo que la situación es diferente porque están pagando de acuerdo a la inflación anual. E, incluso, Rivas sostuvo que algunas han hecho un esfuerzo y están pagando un poco más. La diferencia con las prepagas es que siempre han “pisado” el aumento y fueron otorgando menos, quedando por debajo de la inflación.
Los convenios con las prepagas tienen fecha de vencimiento el 30 de septiembre. Desde el 1° de octubre deben sentarse a renegociar los convenios. “Veremos si podemos llegar a algún tipo de acuerdo”, indicó.
Más adelante, explicó que en su consultorio los pacientes lo entienden y hay otros que piden un recibo para tramitar un reintegro en la prepaga. Asimismo, puso la lupa en el plazo en el que suelen para las prepagas: 30 días luego de presentada la facturación. “Lo que trabajo en septiembre, lo presento en octubre y lo cobro en noviembre”, indicó. Pero recalco que están dispuestos a implementar algunas herramientas tecnológicas para acortar los plazos de pago.
