¿Repartís Pedidos ya?: Sos Casta. ¿Tenes un piso en Punta del Este y una cuenta en Luxemburgo? Zafaste, te bajarán hasta el 80% del impuesto a los bienes personales. Este es el programa que implementa el presidente de todos los argentinos. La cuota del monotributo aumentará y abarcará a casi todos los cuentapropistas, hasta los más bajos de la escala de actividad.
Dicen que no hay nadie más ciego que aquel que no quiere ver. Y esta afirmación cobra todos los días una enorme cuota en aquellos que confiaron que el costo del ‘plan Milei’ lo iba a pagar ‘La Casta’, pero que nunca se imaginaron que ‘la casta’ eran ellos, y no los evasores fiscales, multimillonarios, fugadores de divisas, tenedores de cuantas sin declarar en algún destino off shore, etc.
La noticia está en los medios: “Milei impulsa subir el monotributo a los que menos cobran y bajar el impuesto a la riqueza. Las cuatro categorías más bajas del impuesto de trabajadores independientes, de la A a la D, sufrirán un alza del aporte del 140% al 36%, respectivamente. Los contribuyentes de Bienes Personales que anticipen el pago de 2023/2027 pagarán una alícuota del 0,45%, en lugar del 0,5% al 2,25% actuales, y se asegurarán que ningún futuro gobierno podrá elevarles la carga en los próximos 14 años”.
UN PROGRAMA AMASADO EN EL ODIO A LOS ARGENTINOS Y A LA ARGENTINA
Un programa que tiene tres objetivos claramente identificables
-Saquear el patrimonio del Estado acumulado luego de un siglo de luchas sociales
-Desmembrar y apropiarse del territorio nacional que siempre ha sido codiciado por las más tenebrosas fuerzas de la historia moderna
-Aleccionar con la mayor crueldad, usando el dolor y la manipulación de su conciencia, al pueblo que alguna vez soñó construiría una Patria Libre, justa y Soberana.
Esta es la Argentina que está diseñando el nuevo titular del ejecutivo. Un país en el que para no ser pobre tenés que ingresar a tu billetera unos ochocientos mil pesos por mes, ergo: un país donde el 90% de los jubilados, asalariados, docentes, y…complete Ud. (la lista que es demasiado larga); pasan necesidades de todo tipo. ¡Ah! Y donde los enfermos que recibían medicación del Estado, porque les es imposible adquirirla con medios propios, han quedado desamparados, porque el gobierno ha decidido hacer una ‘auditoría’(SIC) al sistema, y en él mientras tanto, en el supuesto que la auditoría termina alguna vez, si queres morirte morite, lo que es remedios no vas a tener.
Un programa de una perversidad, que ha dejado de ser tal, para transformarse en un vómito de odio a los argentinos. No se puede explicar de ninguna otra manera la decisión de dejar sin remedio a los enfermos terminales, sin comida a los comedores barriales, de quitarle el 50 % de sus ingresos a los jubilados en tres meses.
Hace unos años, un ex presidente del Banco Central, Javier González Fraga, (gobernaba el macriavélico, tal lo sigue haciendo hoy con su alfil Caputo, mientras se ríe del fantoche viéndolo jugar al estadista internacional), con un pie en la escalerilla de un avión que lo llevaba a Panamá, a revisar sus cuentas off shore personales, en las que depositaba ‘el fruto de sus afanes’ como funcionario, se permitió esbozar ese odio que hoy estalla en nuestra cara cuando con un cinismo lacerante nos dijo que “Le hicieron creer a un empleado medio que podía comprarse celulares e irse al exterior, que los pobres podían comer asado todos los domingos, a comprarse un plasma de 40’, a tomarse vacaciones en la playa” y cosas más o menos así, porque mi memoria me traiciona cuando se trata de recordar hijoputeces. En ese momento parecía un pensamiento extremo; hoy, en el marco del odio que destilan los funcionarios del gobierno, suena a ‘observación prudente’ al lado de la crueldad inaudita de estos perversos delirantes que asesinan por falta de remedios y hunden en el hambre a sus propios compatriotas.
¿Hasta cuándo seguirá esto? No sé, no soy adivino, solo un iniciado a algunos temas económicos, que, como tal, sabe qué va a pasar, pero ignora cuando. Por lo que escucho, el sostén político del innombrable está apoyado en sus mismísimas víctimas que consideran que hay que darle tiempo a su verdugo. Esto se escucha en algunos lados; pero también hay que saber que como sustento es demasiado volátil y que en cualquier momento se puede esfumar.
Eduardo
Excelente nota señor director. Unos puntitos mas para agradecerle a los liberotarios y pelotudos.
La historia de repite, han ganado los garcas, pero la olla sigue sumando presión hasta que revienten