Entre otras cosas, los abogados defensores remarcaron que el juez de primera instancia “no tuvo en cuenta que el imputado al comienzo del debate confesó el hecho, se responsabilizó de las consecuencias lesivas de su conducta, pidió disculpas a los familiares de las víctimas, intentó una reparación integral y se declaró arrepentido por lo sucedido”.

La sentencia de primera instancia la emitió el juez Germán Dri en febrero de 2024. Entonces, el joven había sido condenado a tres años de prisión efectiva e inhabilitación especial para la conducción de cualquier tipo de vehículo por el término de 10 años.

El choque

El hecho ocurrió el martes 16 de febrero de 2021, a las 6 de la mañana, cuando el acusado manejaba una camioneta Honda CRV de la empresa Rav Sa y embistió al comerciante Pisani que iba en una Toyota RAV4. Producto de la fuerte colisión, este último falleció.

El siniestro fatal tuvo lugar en la esquina de La Rioja y Corrientes, en el centro de Concordia. Pisani, que se dirigía a su trabajo en la carnicería “La Marca Carnes”, sufrió un traumatismo encéfalo craneano grave y falleció en el hospital “Delicia Concepción Masvernat”.

Van Derdonckt, que conducía alcoholizado y violaba las restricciones para circular por la pandemia de Covid-19, resultó herido y en ese momento quedó detenido.

Tres años después. el 28 de febrero de 2024, el muchacho fue juzgado y declarado autor material y plenamente responsable del delito de homicidio culposo por conducción imprudente de vehículo automotor, doblemente agravado, por estar bajo los efectos del alcohol, con más de un gramo de sangre y por exceder en más de 30 kilómetros por hora la velocidad permitida.

Revocan la prisión

Sin embargo, la defensa del joven apeló la sentencia y el 26 de febrero de este año consiguió que la Cámara de Casación Penal de Concordia revoque la pena de prisión efectiva y disponga el cumplimiento de la condena condicional. La resolución la firmaron los vocales Darío Perroud, María Evangelina Bruzzo y María del Luján Giorgio.

Según el fallo, los magistrados sostuvieron: “Si consideramos que el imputado es una persona joven, a la que se le pueden imponer diferentes reglas de conducta por el plazo de hasta cuatro años, bajo una estricta supervisión y a sabiendas de que su incumplimiento acarrearía la pérdida de su libertad, es fácil advertir que la condena condicional también puede tratarse de un castigo severo con aptitud para satisfacer cuestiones de prevención general”.

En otro pasaje de la extensa sentencia de 35 páginas, publicó UNO, manifestaron que el juez Dri no fundamentó de manera óptima la prisión efectiva. “Sobre todo en casos difíciles como el presente, donde se abren dos alternativas sustancialmente diferentes -privación de la libertad o condena condicional con cumplimiento de reglas de conducta- queda claro que el proceso de determinación de la modalidad de la pena exige un máximo esfuerzo de fundamentación para explicar por qué se descarta la condenación condicional y se opta por la aplicación de una pena efectiva, lo que ha sido deficiente en el caso, por lo cual estimo se debe anular lo relativo a la modalidad de cumplimiento de la pena, disponiendo la condenación condicional, y remitir a un nuevo tribunal para que resuelva lo atinente a las reglas de conducta que corresponda imponer”.

Ahora, la familia de la víctima buscará revertir el fallo acudiendo ante la Sala Penal del Superior Tribunal de Justicia.