La segunda parte no es ni más ni menos que la adhesión al RIGI, un plan sin antecedentes en la economía global, dado que otorga facilidades impositivas y cambiarias excepcionales a las empresas extranjeras que vengan a radicarse bajo el manto de protección de dicho plan. Ventajas definitivas que NO se la dan a las locales ya instaladas, lo que significa el inmediato quiebre y cierre de las pymes locales que deban enfrentar esa competencia. De consagrarse este régimen de promoción impositiva y cambiaria, pasaríamos a ser el único país del planeta, y de la historia de la civilización humana, que diseña y aprueba un plan para liquidar sus propias empresas, las fuentes de trabajo existentes en el país (y la provincia a partir de la iniciativa del actual gobernador) y las fuentes genuinas de recursos fiscales, que desaparecerían junto a ellas.
PERMITANNOS SOLO UN EJEMPLO
En estos días, y a partir de una nota publicada en nuestras páginas, se desató un debate público con el diputado libertario Carlos Damasco, primer impulsor de la adhesión a la provincia al RIGI -Régimen de Incentivo para las Grandes Inversiones-
Una vez expuesto públicamente Damasco, a quién le dijimos que, de resultas de su proyecto, le ponía una alfombra roja a la llegada de plantas de celulosa, salió a los medios a decir que el no apoyaba la llegada de las pasteras, que el estaba pensando en fábricas de casas de madera. Lo que finalmente fue una total incongruencia de su parte, porque si realmente no quisiera la llegada de las plantas de celulosa a la provincia, hubiera puesto en su proyecto que estas (las plantas de celulosa) quedaban exceptuadas de esos beneficios. Cosa que hasta ahora no ha hecho.
Y con respecto a las fábricas de casas de madera que dice promocionar (en abstracto, porque en su proyecto no lo aclara) De venir alguna mega planta de ese tipo, recordamos que se promociona inversiones de más de 200 millones de dólares, las locales que ya existen, por ejemplo en Gualeguaychú, el pueblo de Damasco, inmediatamente quebrarían porque les resultaría imposible enfrentar competidoras que no pagan ningún impuesto, cosas que ellas tendrían que seguir haciendo, en una cuantía aproximada del no menos del 50% de su facturación. O sea, pasando en limpio: no solo no se crearían puestos de trabajo, que se perderían por el cierre de las pymes locales, sino que también se cerrarían fuentes de ingresos fiscales genuinos para el Estado.
FRIGERIO : ¿LA PATA LOCAL DE UN PLÁN DISEÑADO EN EL EXTERIOR?
Ahora, y dado que el diputado libertario Damasco, quedó ‘chairando en el aire’ cuando no pudo defender públicamente su proyecto de adhesión, Frigerio tuvo que salir al ruedo para que el tema no siguiera en manos del improvisado ‘primer promotor’ del nefasto plan y toma las riendas del tema, aunque con su astucia habitual, trata de hacerlo pasar desapercibido, presentando primero un RINI (SIC) una burda imitación del RIGI.
Desde estas páginas advertimos a los legisladores entrerrianos que si aprueban la iniciativa del actual gobernador serán cómplices de la destrucción y entrega al saqueo externo de nuestra provincia.