Mediante un comunicado publicado en redes sociales, los encargados del histórico evento que convoca a mas de 40 mil personas de toda latinoamérica y festejaría en noviembre sus 25 años, anunciaron: “Lamentamos informar que la edición 2024 de la FDD de Paraná, prevista para el 9 de noviembre próximo, ha sido cancelada”
Y agregan: “Desde marzo, hemos mantenido numerosas reuniones con las autoridades para definir y ajustar los detalles del evento y la contraprestación para el municipio por el uso del espacio público, trabajando en minimizar las eventuales molestias a los vecinos y comerciantes, y promover además la participación de distintas entidades sociales de nuestra ciudad»
«Como parte del proceso, consensuamos anunciar hace pocos días y en conjunto, una fecha especial para ampliar el calendario turístico de la ciudad y el emblemático lugar de esta edición, que prometía ser una oportunidad para que Paraná brillara y disfrutara de la edición aniversario de la FDD”.
En cuanto a los motivos que provocaron la suspensión, desde FDD detallaron: «Dada la conocida magnitud y relevancia de la FDD para la comunidad paranaense, su organización requiere meses de trabajo y un firme compromiso de todas las partes involucradas. Sin embargo, en las últimas horas han surgido por parte de las autoridades y fuerzas de seguridad modificaciones y propuestas de relocalización que implicarían poner en riesgo el desarrollo del evento de manera planificada y exitosa, por lo que bajo estas condiciones hemos decidido su cancelación”.
Y concluyen: “Es nuestra responsabilidad garantizar que la FDD, el evento más importante y exitoso de la ciudad en los últimos 25 años, lo siga siendo»
La versión de la Intendenta de Paraná, Rosario Romero
Por su parte, la intendenta de la capital entrerriana, Rosario Romero, confirmo este lunes en rueda de prensa la suspensión de la Fiesta De Disfraces planificada para este 9 de noviembre en la zona del Puerto de la ciudad, e instó a que los organizadores “reconsideren realizarlo en otro lugar de Paraná”.
En cuanto al motivo del pedido de relocalización, la jefa municipal argumentó que «hay diversas razones como la falta de consenso con vecinos y un informe de la seguridad sobre el lugar del puerto”, e insistió: “estamos animando a que esta fiesta, que es privada, se realice en otro lugar, porque nos gustaría tenerla”.
Al ser consultada sobre por qué se planteó este año hacer la fiesta en el Puerto Nuevo y no en la zona del Acceso Norte, mencionó que “es sabido que ese predio tenia inconvenientes como el terreno blando, dificultades con la lluvia, y la gente llegaba muy tarde porque se debían recorrer muchos kilómetros”.
“Confluyeron muchos temas, como capacidad del espacio, sectores de entrada salida y diversas voces de vecinos. Somos un Estado abierto que escucha, pero esta fue una decisión que tomaron los propios organizadores”, aclaró, al sostener que “en una ciudad de unos 300 mil habitantes siempre hay tensiones y pujas; el Estado tiene que escuchar y fortalecer los acuerdos y propiciamos el dialogo con los organizadores y vecinales de la zona”.