La semana pasada, el juez Federal Federico Martín, remitió a juicio una causa que tiene como imputados a Jesús Alberto Magallanes, Oscar Alberto Magallanes y Miguel Ramón Morales, quienes admitieron haber realizado una quema de pastizales en las inmediaciones de su rancho a modo de contrafuego, ya que existían focos ígneos que se aproximaban al asentamiento en el que tenían sus colmenas.
Los imputados son oriundos de San Pedro, provincia de Buenos Aires, y tenían unos cajones con colmenas en las Islas Lechiguanas, departamento Gualeguay, frente a la localidad bonaerense. El 22 de agosto de 2022 se enteraron que el fuego que se extendía en el humedal se acercaba hacia donde estaban las abejas y decidieron hacer un contrafuego para tratar de impedir el avance de las llamas.
El contrafuego es una práctica que consiste en generar un fuego para que otro fuego que se aproxima se quede sin oxígeno, pero los únicos autorizados en hacerlo son bomberos o mediante planes de manejo incendios. Lo que hicieron los apicultores fue cortar pastos y otros materiales vegetales circundantes al lugar donde tenían sus colmenas, para que cuando llegara el fuego no tuviera ese material combustible y se apagara.
El error fue que leyeron mal el comportamiento del viento, que terminó rotando hacia donde estaban ellos y lo que pretendía ser un fuego focalizado terminó siendo un incendio fuera de control que habría afectado unas 6 mil hectáreas.
CARGOS
Los tres apicultores están imputados por estrago doloso, un delito que prevé penas de 3 a 10 años de prisión para «aquel que causare incendio, explosión o inundación, habiendo generado un peligro común para bienes o personas indeterminadas». Es la misma figura que se aplicó, por ejemplo, a los acusados por la explosión de la fábrica militar de Río Tercero para ocultar la venta ilegal de armas durante el menemismo.
El concepto de la imputación es que los apicultores provocaron un incendio –que pretendió ser controlado– a sabiendas de que tras 3 años de sequías, la actividad que pretendían realizar estaba expresamente prohibida por Decreto Nacional.
En tanto, en los próximos días será elevada a juicio otra causa que tiene como imputados a otros tres apicultores que habrían provocado un incendio en la denominada Isla del Holandés, en jurisdicción del departamento Gualeguay.
En ese caso, los imputados son Rodolfo Herrera, de 54 años, y sus hijos Daniel y Adán Ignacio Herrera, de 22 y 18, oriundos de Villa Constitución. Sobre ellos, informó ERA Verde, fueron sorprendidos en un avistaje aéreo e inmediatamente se montó un operativo por tierra y agua en conjunto con la Policía de Entre Ríos en el que fueron detenidos y se les secuestraron una horquilla, una pala ancha, un encendedor, tres celulares y una lancha.
En sus declaraciones dijeron ser apicultores que estaban en el lugar realizando un contrafuego para impedir el avance de las llamas y argumentaron que lo hicieron para proteger los panales que explotaban en esa zona del humedal.